LA OCTAVA APARICIÓN
La fecha: Sábado 20 de Mayo de 1944
Hora: 18:00
Los Presentes: Alrededor de 30.000 personas
La visión: La Sagrada Familia
Adelaide, acompañada por el Sacerdote, Don César Vitali y su prima María, fue a Bergamo a informarle a el obispo el secreto recibido por Nuestra Señora. La prima habló con el obispo sobre el anuncio de un milagro entregado a Adelaide al final del primer ciclo de las apariciones.
Aquella tarde en la Ghiaie, había una gran muchedumbre esperando la presencia de Adelaide.

Del cuaderno de Adelaide:
"Como siempre por la tarde yo seguía esperando sobre la piedra la llegada de Nuestra Señora. Apareció de nuevo la Sagrada Familia y la Virgen me dijo: “Mañana será la última vez que yo te hable entonces durante siete días, te permitiré, pensar bien todo lo que te he dicho. Trata de entenderlo bien porque cuando tú seas más grande te servirá mucho sí quieres ser toda mía. Después de estos siete días volveré todavía cuatro veces más”. Ella tenía la voz muy armoniosa y bonita más cuando yo quise imitarla, nunca tuve éxito.

Como en Fátima también en Ghiaie se verificaron fenómenos celestiales, que nunca antes habían ocurrió.
La Doctora Eliana Maggi testificó bajo juramento el día 16 enero de 1946 delante del Comité del Obispo: Aquel sábado era un día lluvioso. Al principio de la aparición caía un rayo de sol sobre la cabeza de la niña. Yo he alzado los ojos y vi formar una cruz en el cielo y una lluvia de puntos de oros y plata, por un minuto o dos, y todos han gritado al ver el milagro."
Don Luigi Cortesi escribió hablando del fenómeno solar de esa tarde de sábado:
"Algunos notaron un extraño haz de luz que intensamente iluminó a la niña y se reflejaba en las caras circundantes. Otros vieron el sol en el forma de cruz; otros vieron el disco solar girar vertiginosamente en un círculo mayor no más de medio metro. En las capas bajas de la atmósfera, se vieron lluvias de estrellitas de oro, nubecitas de color amarillo en forma de anillos, tan denso y tan cerca de ellos que algunos intentaron agarrar con sus manos. Sobre las manos y los rostros de los espectadores se iban degradando en diversos colores, con predominio del color amarillo; se vieron las manos fosforescentes y globos de luz en forma de ostias…"
 

Interpretazione dell'Apparizione
della Sacra Famiglia
 

La pagina del Diario di Adelaide:
20 Maggio
 
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